Rosa A. Zárate Grajales
La pandemia de COVID-19 que llegó al mundo a inicios del año 2020 ha frenado abruptamente la formación clínica de los estudiantes de enfermería y enfermería y obstetricia en nuestro país, así como en el mundo entero. Dicha interrupción tendrá, seguramente, implicaciones a mediano y largo plazo en la fuerza de trabajo de enfermería en el sistema de salud y en la respuesta sanitaria ante futuras pandemias.
La pregunta es, entonces, ¿cómo le hacemos para fortalecer la educación clínica del estudiantado de enfermería en esta época de reconversión educativa y de salud frente a una crisis económica sin precedentes? ¿Cuáles deben ser las competencias de los egresados ante esta difícil situación en el escenario educativo y de salud?