;
R. Krepinska
[13]
;
M. Lesinska-Sawicka
[14]
;
M. Liskova
[15]
;
A. L. Lopez-Diaz
[3]
;
M. Malliarou
[16]
;
Á. Martín-García
[17]
;
M. Muñoz-Salinas
[1]
;
M. Nagórska
[18]
;
R.N. Ngunyulu
[19]
;
S. Nissim
[20]
;
L. Nortvedt
[21]
;
M.F. Oconer-Rubiano
[11]
;
C. Oter-Quintana
[2]
;
C. Öztürk
[22]
;
K. Papp
[23]
;
B. Piratoba-Hernandez
[3]
;
E. Rousou
[24]
;
M.Y. Tolentino-Diaz
[25]
;
V. Tothova
[26]
;
A. Zorba
[27]
;
C. Kouta
[24]
Santiago, Chile
Madrid, España
Colombia
Objetivo: Analizar las opiniones de gestores de enfermería y enfermería obstétrico-ginecológica (matrona) con respecto a los obstáculos a la compasión en las culturas de los países.
Antecedentes: Se defiende el beneficio del liderazgo compasivo, pero a pesar del hecho que la atención sanitaria, invariablemente, se presta en lugares de trabajo culturalmente diversos, rara vez se aborda la interconexión de la cultura, la compasión y del liderazgo. Además, se carece de evidencia sobre cómo los factores culturales obstaculizan la expresión de compasión entre gestores de enfermería y enfermería obstétrico-ginecológica (matrona).
Métodos: Encuesta en línea, transversal, exploratoria e internacional en la que intervinieron 1217 participantes de 17 países. Las respuestas de los gestores a las preguntas abiertas relacionadas con las barreras para brindar compasión se introdujeron y analizaron temáticamente a través de NVivo.
Resultados: Emergieron en todos los países tres temas clave relacionados con los obstáculos a la compasión:
1.relacionados con las características y experiencias personales de los gestores;
2.relacionados con el sistema; y 3.autorrelacionados.
Conclusiones: Los obstáculos a la compasión entre los gestores varían entre países. Es importante comprender las variaciones entre países y culturas que impiden aflorar la compasión en la atención sanitaria.
Implicaciones para la práctica y política de enfermería: Los gestores de enfermería deberían utilizar sabiamente su poder adoptando estilos de liderazgo que promuevan lugares de trabajo culturalmente competentes y compasivos con respeto a los derechos humanos. Los políticos tendrían que identificar las necesidades de formación y tutoría para permitir el desarrollo de la sabiduría práctica de los gestores. Las políticas nacionales e internacionales apropiadas deberían facilitar el establecimiento de estándares y directrices para el liderazgo compasivo, frente a culturas organizacionales distorsionadas y obstáculos relacionados con el sistema para mostrar compasión.