La consolidación de una zona de apoyo a la investigación en red, que fomente la investigación colaborativa, la formación y la difusión de conocimientos mediante las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) suponen ante todo la organización de una metodología de trabajo para compartir e intercambiar recursos en una red concreta que ya está en funcionamiento.
Serán necesarios el establecimiento de mecanismos de comunicación entre los investigadores de distintos grupos;
introducción de las TIC en la formación y entornos avanzados de formación en investigación; diversos inventarios de recursos de investigación susceptibles de intercambio y de utilización conjunta entre grupos y laboratorios; un sistema de documentación científica compartida y un adecuado mantenimiento de todas estas herramientas. No se trata de crear grandes estructuras administrativas y planes detallados para cumplir todas estas funciones, sino de disponer de herramientas efectivas para combinar esfuerzos y buscar recursos en todas estas áreas, con la agilidad y flexibilidad que nos permiten hoy el uso de las nuevas tecnologías de comunicación e información.
Los resultados de esta zona de apoyo a la investigación, deben traducirse en un aumento de la eficacia y calidad de la red, al aumentar el flujo de información y la colaboración intergrupos en la docencia, investigación y desarrollo profesional así como la transferencia y difusión de los resultados de investigación.