En el presente estudio se pretende evaluar la relación entre la composición corporal, la auto-percepción de la imagen y el tipo e intensidad del ejercicio físico practicado en un grupo de jóvenes madrileños de 13 a 19 años. Estas asociaciones son fundamentales en la adolescencia, periodo de importantes cambios físicos y psicológicos que está fuertemente influenciado por una sociedad centrada en el culto al cuerpo. La metodología utilizada ha sido, en primer lugar la entrega de encuestas en las que se interrogaba a los jóvenes sobre el ejercicio físico realizado fuera del aula. En segundo término un cuestionario para la percepción de su imagen corporal basado en la elección de siluetas (asociadas a distintos Índices de Masa Corporal o IMC) y finalmente la toma de dimensiones antropométricas encaminadas a la valoración de la composición corporal. Los resultados obtenidos confirman que existe una distorsión de la percepción corpórea en ambos sexos. Sin embargo, es curioso comprobar que, aunque dicha alteración es mayor en el sexo masculino, los varones no muestran deseos de adelgazar mientras que la mayoría de las mujeres si tienen dicha pretensión. Este hecho influye en el tipo de actividad física escogida ya que, sobre todo las chicas, escogen actividades de tipo individual aeróbico cuya finalidad suele ser disminuir el IMC, mientras que ellos denotan preferencia por los deportes en equipo que no muestran dicho propósito.