T. Pi-Sunyer Cañellas, Marta Banqué Navarro, Núria Freixas Sala, Fernando Barcenilla Gaite
El lavado de las manos se ha considerado con razón una medida de higiene personal durante siglos. Actualmente se dispone de suficiente evidencia científica que demuestra que esta medida sencilla y barata puede ayudar a reducir las infecciones de forma clínica y sanitariamente significativa. A pesar de ello, los estudios publicados muestran que la higiene de las manos se realiza sólo entre un 15 y un 50% de las veces en las que debería llevarse a cabo. Con objeto de apoyar a los diferentes países en el establecimiento de prioridades para hacer frente a las infecciones relacionadas con la atención sanitaria, la Organización Mundial de la Salud ha desarrollado una campaña destinada a mejorar el cumplimiento la higiene de las manos. Para ello son elementos clave la formación del personal, el cambio de sus hábitos, su motivación y la accesibilidad a los productos en los puntos de atención a los pacientes. A nivel institucional es necesario que los gestores sanitarios se posicionen de forma manifiesta, situando la higiene de las manos como uno de los objetivos de calidad de la institución.