Objetivo:
Este estudio investiga la mediación de la calidad del sueño entre la salud percibida y el burnout ocupacional en enfermeras hospitalarias, considerando la moderación de la violencia ocupacional y la cultura organizacional.
Antecedentes:
Los factores ocupacionales provocan malestar físico y malestar mental, burnout y problemas de sueño en las enfermeras. Aproximadamente dos tercios de las enfermeras experimentan burnout, repercutiendo en la calidad y la seguridad de la atención al paciente. Cultivar una cultura organizacional positiva es esencial para la estabilidad de la plantilla de enfermería.
Métodos:
Este estudio transversal empleó un muestreo de conveniencia para seleccionar reclutar a 346 profesionales de enfermería de un hospital universitario del sur de Taiwán en julio-agosto de 2020 (tasa de respuesta: 87.3 %). Se emplearon cuestionarios autoadministrados que contenían instrumentos validados, entre ellos una escala adaptada de burnout profesional, la versión china de una escala de cultura organizacional, un Cuestionario de Salud Percibida, una Escala de Experiencia de Violencia en el Lugar de Trabajo y el CPSQI; todos los instrumentos eran fiables y válidos. El análisis incluyó estadísticas descriptivas, regresión lineal y la técnica de Johnson-Neyman.
Resultados:
Las enfermeras con mejor salud percibida mostraron un burnout ocupacional significativamente menor (p < 0.001). La salud percibida influyó indirectamente en el burnout a través de la calidad del sueño (p < 0.01), con la cultura organizacional como moderador parcial. La cultura organizacional exacerbó esta relación. Además, una menor violencia ocupacional moderó las conexiones entre la salud percibida, la calidad del sueño y el burnout ocupacional entre las enfermeras.
Conclusiones:
Dada la correlación inversa entre la salud percibida por las enfermeras y el burnout ocupacional, y teniendo en cuenta factores como la violencia ocupacional, la cultura organizacional y la calidad del sueño, las instituciones sanitarias pueden tomar medidas proactivas que mejoren el bienestar general de las enfermeras y mitiguen el burnout ocupacional.
Implicaciones para la enfermería y para la política sanitaria:
Implementando programas de bienestar, apoyo a la salud mental, formación en seguridad, sistemas de denuncias rigurosas y un enfoque de tolerancia cero frente a la violencia, las partes interesadas de la atención sanitaria pueden fomentar un entorno ocupacional seguro y propicio para las enfermeras, mejorando así el bienestar, los resultados de los pacientes y la calidad de la asistencia sanitaria.