El debate científico sobre la necesidad de un indicador global de discapacidad percibida se inició durante la novena reunión de Euro - REVES en Roma en 1996, a partir del minucioso trabajo de Verbrugge (Robine, Jagger, & Romieu, 2002). Allí se describieron los criterios conceptuales y prácticos a modo de guías en el proceso de selección y desarrollo de un indicador global de limitaciones de la actividad (en inglés: Global Activity Limitation Index—GALI). En 2001, la revisión de la Clasificación Internacional de Funcionamiento, Discapacidad y Salud (conocido como CIF) de la OMS, proporcionó una mejor base conceptual al GALI (OMS., 2001). Al igual que el Modelo de Discapacidad de Verburgge y Jette, CIF ofrece una visión biopsicosocial coherente de los estados de salud. En dicha revisión se definieron las limitaciones en la actividad como “las dificultades que el individuo experimenta en la ejecución de la actividad debido a una condición de salud”; y actividad como "la ejecución de una tarea o acción por un individuo". Así pues, la dimensión de la actividad de CIF dio un perfil de funcionamiento del individuo en términos de actividades, de simples a complejas, y que se referían a las actuaciones de la persona. Las limitaciones de la actividad se evalúan frente una población estándar generalmente aceptada, en relación a expectativas culturales y sociales. La finalidad del GALI debería de ser descriptiva, analítica, de detección y que proporcionara una visión general de la discapacidad con utilidad científica por encima de la de otros instrumentos más detallados, y que fuera un instrumento para estimar la percepción de las limitaciones de la actividad dentro de una población mediante una serie concisa de preguntas. El Euro–REVES diseñó el GALI así: Durante los últimos 6 meses, ¿en qué medida se ha visto limitado/a debido a un problema de salud para realizar las actividades que la gente habitualmente hace? Dando tres categorías de respuesta, 1) Sí, gravemente limitado; 2) Sí limitado pero no gravemente; 3) No, Nada limitado. Actualmente el GALI forma parte del módulo mínimo europeo de la Salud, junto con el indicador de salud percibida, con el objetivo particular de comparar las expectativas de salud en Europa (Jagger, y otros, 2010). La hipótesis se ve refutada por los resultados obtenidos GALI, como medida de discapacidad percibida se asocia principalmente con medidas de discapacidad y limitaciones funcionales y secundariamente con medidas de morbilidad física y mental. salud percibida como medida de salud general, se asocia principalmente con medidas de morbilidad física y mental y secundariamente con medidas de discapacidad y limitaciones funcionales.