• Los inhibidores de la bomba de protones (IBP) constituyen unos de los grupos farmacológicos de mayor consumo en el mundo y con un elevado porcentaje de inadecuación.
• El amplio uso de los IBP en la población hace que la frecuencia de efectos adversos sea significativa, del mismo modo su uso prolongado se ha asociado a efectos adversos graves.
• La supresión brusca del tratamiento se ha relacionado con la hipersecreción ácida de rebote, por lo que se recomienda retirarlos de forma paulatina.
• Se recomienda suspender el IBP al mes y medio/dos meses de haber iniciado la reducción de dosis.