Jorge Salas Braconi, Víctor Verna
Introducción: Aún no se ha establecido con claridad el origen de la enfermedad del segmento adyacente en la columna cervical y no existe consenso en la bibliografía al respecto. El desarrollo de nuevas técnicas que preservan el movimiento cuestiona los resultados a largo plazo de la artrodesis.
Materiales y métodos: Se evaluaron en forma retrospectiva 34 pacientes en quienes se realizó cirugía primaria de la columna cervical por vía anterior con injerto intersomático óseo, cajas o jaulas y placa con tornillos. El seguimiento promedio fue de 4 años (2-8) y la edad promedio, de 42 años (24-62). El diagnóstico inicial fue hernia de disco en 22 casos, fractura en 8 y patología degenerativa en 4 casos. Los espacios artrodesados fueron de un nivel en 23 casos, de dos niveles en 8 y de tres o más niveles en 3 oportunidades. Se evaluaron radiografías de frente y de perfil, en máxima flexión y extensión en el prequirúrgico y a partir de los 12 meses de la operación, en las que se cuantificó la altura intersomática de los espacios suprayacentes e infrayacentes y se estableció una relación porcentual con la altura del cuerpo vertebral. Dichos discos fueron categorizados según los criterios de Hilibrand.
Resultados: Los niveles adyacentes caudal y craneal no mostraron cambios significativos de altura en relación con el disco normal, tomando como referencia los discos no adyacentes. Clínicamente hubo 64,70% (22 casos) de resultados excelentes y 35,3% de buenos resultados (12 casos). No se observaron resultados regulares o malos.
Conclusiones: La artrodesis cervical por vía anterior no acelera la degeneración discal; los cambios concuerdan con los fenómenos degenerativos naturales observados en los pacientes asintomáticos. Los niveles con fenómenos incipientes de disminución de altura no merecen ser incorporados al área de artrodesis en el momento de planificar la cirugía. Estos resultados se sustentan en una técnica quirúrgica adecuada y una elección del nivel libre a la artrodesis sin patología.
Background: The origin of adjacent segment disease in the cervical spine has not been clearly established, as there is no consensus in the literature. New motion-preserving techniques challenge the long-term results of arthrodesis.
Methods: 34 patients undergoing primary cervical spine surgery through an anterior approach with interbody bone graft, boxes or cages, and plates and screws were retrospectively evaluated. Average follow-up was 4 years (2-8), mean age was 42 (24-62), and initial diagnoses were disc herniation (22), fracture (8), and degenerative pathology (4). Arthrodesed spaces were one-level in 23 cases, two-levels in 8 cases, and three- or more levels in 3 instances. Front and lateral X-rays were evaluated, at maximum flexion and extension, in the pre-op and after 12 months post-op, where the interbody height of the overand underlying spaces was quantified, thereby establishing a percentage relationship with the vertebral body height. Said discs were categorized according to Hilibrand’s criteria.
Results: The caudal and cranial adjacent levels did not show significant changes in height as compared to the normal disc, taking non-adjacent discs as reference. Clinically, excellent results were obtained in 64.7% (22 cases) and 35.3% (12 cases) were good --there were no poor or bad results.
Conclusions: Anterior cervical spine arthrodesis does not hasten disc degeneration; the changes observed are in line with the degenerative phenomena naturally observed in asymptomatic patients. Levels with early height reduction should not be included in the arthrodesis when planning the surgery. These results are supported by an appropriate surgical technique and a choice of the free level in non-pathologic arthrodesis.