Ana Valero Martínez, Ángel Pueyo Diarte, Paula Sánchez Parra, Ana Martínez Aso, Teresa Granada González, Raquel Abad Callejas
Artículo sobre un proceso de atención de enfermería (PAE) a paciente que presenta ideación autolítica. El Proceso de Atención de Enfermería (PAE) es un método sistemático que guía a los enfermeros en la provisión de cuidados individualizados a los pacientes. Este enfoque permite una atención integral y centrada en el paciente, promoviendo mejores resultados de salud1.
Un PAE consta de las siguientes fases:
Valoración.
Diagnósticos (NANDA).
Planificación (Objetivos NOC).
Ejecución (Intervenciones NIC).
Evaluación.
Los intentos autolíticos en adolescentes son preocupantes y están influenciados principalmente por factores psicológicos, familiares, sociales y biológicos. La depresión, la ansiedad y el abuso de sustancias son comunes entre los jóvenes con pensamientos suicidas. Problemas familiares como el abuso y los conflictos, así como el bullying y el aislamiento social, aumentan el riesgo. Señales de alerta incluyen cambios de comportamiento, aislamiento y expresiones de desesperanza.
La prevención y la intervención son claves. Reconocer las señales de alerta y proporcionar un entorno de apoyo es esencial. La terapia individual y familiar, así como los programas escolares sobre salud mental, ayudan a manejar el problema. Facilitar el acceso a servicios de salud mental es crucial para ofrecer el apoyo necesario a los adolescentes2.
Article about a nursing care process (NCP) for a patient who presents with autolytic ideation. The Nursing Process (NP) is a systematic method that guides nurses in providing individualized care to patients. This approach enables comprehensive and patient-centered care, promoting better health outcomes1.
A NCP consists of the following phases:
Assessment.
Diagnostics (NANDA).
Planning (NOC Objectives).
Execution (NIC Interventions).
Assessment.
Suicidal attempts in adolescents are a significant concern, influenced by psychological, familial, social, and biological factors. Depression, anxiety, and substance abuse are common among youths with suicidal thoughts. Family issues such as abuse and conflicts, as well as bullying and social isolation, increase the risk. Warning signs include behavioral changes, withdrawal, and expressions of hopelessness.
Prevention and intervention are crucial. Recognizing warning signs and providing a supportive environment is essential. Individual and family therapy, along with school programs on mental health, help address the issue. Facilitating access to mental health services is critical to offering necessary support to adolescents2.