Cristina Lacadena Martínez, Javier Nicolás Vicente Moreno, Marina Cabrero López, Monika Antonova Taushanska, Violeta Muñoz Muñoz, Alba Betato Soler
En este texto, se aborda la complejidad del tratamiento de la lumbalgia crónica y se examinan diversas opciones terapéuticas, con un enfoque particular en la cirugía de fusión lumbar. En 2009, la American Pain Society recomendó una rehabilitación interdisciplinaria como alternativa a la cirugía, lo que generó controversia y diversas investigaciones sobre los resultados de la terapia conservadora. Aunque aún no existe un enfoque «gold standard» para tratar esta condición, varios estudios comparativos han analizado la efectividad de la cirugía de fusión lumbar y tratamientos no quirúrgicos, pero carecen de estudios a doble ciego.
La cirugía de fusión lumbar se ha establecido como una opción para pacientes con lumbalgia crónica, con el propósito de estabilizar el área afectada, aliviar la compresión neural y corregir deformidades, restableciendo la lordosis lumbar. Aunque existen múltiples técnicas quirúrgicas, no hay evidencia definitiva de una superioridad en términos de resultados clínicos. La cirugía mínimamente invasiva es una alternativa menos invasiva que ha surgido recientemente.
El proceso de selección de pacientes para la cirugía de fusión lumbar es crucial, recomendándose cuando otras medidas conservadoras han fallado durante meses. Factores modificables y no modificables pueden afectar los resultados postoperatorios. La literatura sugiere que el tabaquismo no afecta negativamente los resultados, mientras que factores como la edad, género femenino, obesidad y raza afroamericana se asocian con peores resultados. Sin embargo, más variables necesitan ser estudiadas.
En conclusión, el manejo de la lumbalgia crónica presenta desafíos y controversias. Aunque la cirugía de fusión lumbar es una opción bien establecida, la falta de estudios a doble ciego complica la elección de la mejor terapia. La selección adecuada de pacientes y la consideración de factores de riesgo son cruciales para optimizar los resultados postoperatorios y mejorar la calidad de vida de los pacientes que se someten a esta cirugía.
In this text, the complexity of the treatment of chronic low back pain is addressed and various therapeutic options are examined, with a particular focus on lumbar fusion surgery. In 2009, the American Pain Society recommended interdisciplinary rehabilitation as an alternative to surgery, which generated controversy and several investigations on the results of conservative therapy. Although there is still no «gold standard» approach to treat this condition, several comparative studies have analyzed the effectiveness of lumbar fusion surgery and non-surgical treatments, but double-blind studies are lacking.
Lumbar fusion surgery has been established as an option for patients with chronic low back pain, with the purpose of stabilizing the affected area, relieving neural compression and correcting deformities, restoring lumbar lordosis. Although there are multiple surgical techniques, there is no definitive evidence of superiority in terms of clinical results. Minimally invasive surgery is a less invasive alternative that has recently emerged.
The patient selection process for lumbar fusion surgery is crucial, being recommended when other conservative measures have failed for months. Modifiable and non-modifiable factors can affect postoperative results. The literature suggests that smoking does not negatively affect outcomes, while factors such as age, female gender, obesity and African-American race are associated with worse outcomes. However, more variables need to be studied.
In conclusion, the management of chronic low back pain presents challenges and controversies. Although lumbar fusion surgery is a well-established option, the lack of double-blind studies complicates the choice of the best therapy. Proper patient selection and consideration of risk factors are crucial to optimize postoperative outcomes and improve the quality of life of patients undergoing this surgery.