Marta Valentina del Campo Labordeta, Noé Larroy Gil, Héctor Hernando Martín, Carmen Barriendos Dalmau, María Carbó Cortés
La profesión enfermera ha experimentado una notable evolución a lo largo del tiempo. Históricamente, los cuidados enfermeros, generalmente vinculados a la mujer, gozaban de enorme empatía, humanidad y afecto y escasísimo reconocimiento social, laboral y económico. Entre los años 1976 y 1978 se protagonizaron grandes movilizaciones sanitarias nacionales para que la profesión tuviera un mayor reconocimiento, priorizándose lo técnico y lo terapéutico y perdiendo peso el cuidado humano. Este cuidado humano es lo que se conoce como cuidados invisibles o técnicas blandas, siendo los cuidados más agradables y reconfortantes para los enfermos.
The nursing profession has undergone a remarkable evolution over time. In the beginning, nursing care, generally linked to women, enjoyed enormous empathy, humanity and affection and very little social, labor and economic recognition. Between 1976 and 1978, major national health mobilizations took place for the profession to gain greater recognition, prioritizing technical and therapeutic aspects and losing weight to human care. This human care is what is known as invisible care or soft techniques, being the most pleasant and comforting care for the sick.