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Lorena Tejero Vidal
La atención a los enfermeros llevados a cabo por parte de las HCSVP se plasmaba a partir de las Conferencias Espirituales a las Hijas de la Caridad por parte de San Vicente de Paúl como en las Reglas Comunes y Particulares de la congregación. Las hermanas debían aportar cuidado y consuelo, así como “la manera de vivir bien y de morir bien, como buenos cristianos”. Idea que evidentemente se enmarca en una etapa de crecimiento de la enfermería religiosa. El “enfermo no es un número, no es un caso clínico; el enfermo es un alma que se ha de salvar y un cuerpo que se ha de atender”. La ponencia, transitará por las imágenes gráficas que de las hermanas tenemos y que nos permiten construir un discurso de legado de cuidados espirituales y corporales imprescindible para entender su aportación a los cuidados como profesionales de la enfermería.
