Laura Pilar López López, Lucía Quintilla Campodarve, Inés Peralta Nicolás, Diego Klaas Fábregas, Paula Sánchez Acereda, Miguel Alcalá Galve
Una quemadura es la reacción que se produce cuando la piel entra en contacto con agentes físicos y químicos que le producen algún tipo de lesión. Se clasifican en función de la etiología, superficie corporal afectada y profundidad de la quemadura. Pueden estar producidas por agentes térmicos, eléctricos, químicos o radiaciones. En España 300 de cada 100.000 habitantes sufren una quemadura que requiere atención médica. La curación de estas lesiones conlleva varias fases dinámicas y superpuestas denominadas fase inflamatoria, proliferativa y final. El tratamiento de las mismas se basa en medidas farmacológicas y no farmacológicas. En primer lugar, se eliminará la causa de la quemadura y se realizará una valoración inicial del paciente, asegurando la vía aérea. Asimismo, se realizará una reanimación con líquidos, estimando mediante la fórmula de Parkland las necesidades hídricas. Como medidas complementarias se debe controlar el dolor, garantizar la adecuada nutrición del paciente, se evitará la aparición de septicemia y el control de flictenas y se llevará a cabo un tratamiento quirúrgico de las lesiones (a través de la escarotomía, la escisión quirúrgica o la cobertura de la piel mediante autoinjertos o sustitutos de la piel) o un tratamiento local con apósitos y pomadas con diferentes características.
A burn is the reaction that occurs when the skin comes into contact with physical and chemical agents that cause some type of injury. They are classified based on etiology, affected body surface and depth of the burn. They can be produced by thermal, electrical, chemical or radiation agents. In Spain, 300 out of every 100,000 inhabitants suffer a burn that requires medical attention. Healing of these lesions involves several dynamic and overlapping phases called the inflammatory, proliferative, and final phases. Their treatment is based on pharmacological and non-pharmacological measures. Firstly, the cause of the burn will be eliminated and an initial assessment of the patient will be carried out, ensuring the airway. Likewise, fluid resuscitation will be performed, estimating water needs using the Parkland formula. As complementary measures, pain must be controlled, adequate nutrition of the patient must be guaranteed, the appearance of sepsis will be avoided and blictena must be controlled, and surgical treatment of the lesions must be carried out (through escharotomy, surgical excision or skin coverage using autografts or skin substitutes) or local treatment with dressings and ointments with different characteristics.