Las úlceras por presión se han tratado a lo largo de los años con muy variados tratamientos, entre ellos, el más utilizado es el de la cura húmeda. No obstante, la terapia de presión negativa parece ser también una muy buena opción a valorar en cada caso individualizado con el objetivo de eliminar el exudado y así aumentar la velocidad de crecimiento del tejido de granulación. Además, si se combina con la infiltración de suero salino fisiológico o hipotónico antes de la presión negativa puede potenciar dichos beneficios y mejorar la calidad de vida de las personas que las sufren. Sin embargo, en personas con baja perfusión del tejido de los bordes de las úlceras por presión, la terapia de presión negativa podría empeorar su situación y dar lugar a la aparición de nuevas lesiones.
Over the years, pressure ulcers have been treated with many treatments, among which wet dressing is the most used. However, negative-pressure wound therapy seems to be a good choice that has to be evaluated individually as well in order to remove exudate, accelerating growth speed of granulation tissue. Furthermore, if it is combined with physiological saline or hyposaline solution installation before the negative pressure, it may enhance the technique’s benefits and improve pressure injury owners’ quality of life. Nevertheless, in diminished-peripheral blood flow people, negative pressure wound therapy might worsen their situation and lead to appearance of new injuries.