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Las cifras sobre niños con sobrepeso y obesidad han aumentado de forma exponencial en las últimas décadas, convirtiéndose en un problema de salud pública de gran calado, motivo más que suficiente y justificado para crear un plan de acción que ponga freno y revierta la situación.
Las enfermeras escolares son claves en las intervenciones tempranas dirigidas a estos problemas de salud infantil tanto en prevención como promoción de la salud, convirtiéndose en agentes de salud activos dada su labor diaria.
Varios estudios sobre la comunicación entre éstas y padres de escolares revelaron una falta de conocimiento en habilidades y herramientas en comunicación.
Describieron la experiencia estigmatizante sobre obesidad y sobrepeso, ya que destacan infinidad de maneras de comunicación y expresión emocional en la asunción de estos problemas.
Se muestra claramente una inconsistencia en la forma de proceder y justifica más aún la necesidad de crear procedimientos unificados y basados en la evidencia.
Por lo que es necesaria una profunda puesta en común de criterios y destrezas a fin de elaborar un plan de salud estratégico a nivel escolar y unificar las líneas de actuación acorde a un protocolo general y común que, además, pueda ser individualizado a cada alumno y sus particularidades.
En adición a estos requerimientos, se hace patente la necesidad de aumentar la formación de los profesionales en habilidades de comunicación eficaz y asertividad.
Con todo esto conseguiremos empoderar al escolar y su familia siendo capaces de manejar destrezas útiles en la adquisición de estilos de vida saludables.
Overweight and obesity in childhood has increased exponentially in recent decades, becoming a deep public health problem, which must be enough and justified reason to create an action plan to curb and reverse the situation.School nurses are key in early interventions aimed at these child health problems, both in prevention and health promotion, becoming active health agents given their daily work.Several studies on communication between them and parents of schoolchildren revealed a lack of knowledge in communication skills and tools.They described the stigmatizing experience of obesity and overweight, since they highlight countless ways of communication and emotional expression in assuming these problems.It clearly shows an inconsistency in the way of proceeding and further justifies the need to create unified and evidence-based procedures.Therefore, a deep pooling of criteria and skills is necessary in order to develop a strategic health plan at the school level and unify the lines of action according to a general and common protocol that, in addition, can be individualized to each student and its particularities.In addition to these requirements, the need to increase the training of professionals in effective communication skills and assertiveness becomes clear.With all this we will be able to empower the student and his family, being able to manage useful skills in the acquisition of healthy lifestyles.
