Andrea González Castillo, Almudena Velando Soriano, Emilia Inmaculada de la Fuente Solana, María Begoña Martos Cabrera, María José Membrive Jiménez, Lucía Ramírez Baena, Guillermo Arturo Cañadas de la Fuente
Objetivo:
Estudiar la relación entre burnout y resiliencia e identificar el perfil de las enfermeras que presentan esta cualidad.
Antecedentes e introducción:
Los profesionales sanitarios están sujetos a altos índices de burnout. La resiliencia podría ser un factor importante para prevenir o aliviar esta condición.
Métodos:
Se consultaron las bases de datos PubMed, ProQuest, Scopus y ScienceDirect en febrero de 2022 utilizando la ecuación “burnout Y resilience Y nurs*”. Los criterios de inclusión aplicados fueron que los textos describieran estudios cuantitativos, estuvieran publicados en inglés o español, en cualquier año y que se relacionasen directamente con la cuestión en vista. El metaanálisis se ejecutó utilizando el software estadístico StatsDirect.
Resultados:
El análisis de los 29 estudios muestra que, entre las dimensiones del burnout, las enfermeras son especialmente propensas al agotamiento emocional y se ven menos afectadas por la despersonalización y la baja realización personal. Quienes obtienen puntuaciones altas en resiliencia tienden a tener una experiencia de servicio más larga, salarios aceptables y menos sobrecarga laboral. El metaanálisis revela una correlación inversa entre resiliencia y burnout (r = −0.41; n = 2750), agotamiento (r = −0.27; n = 6966) y despersonalización (r = −0.23; n = 6115).
Conclusión:
Muchas enfermeras presentan bajos niveles de resiliencia y padecen síndrome de burnout. La aplicación de programas para mejorar su resiliencia ayudaría a prevenir el burnout y optimizar el potencial para proporcionar atención sanitaria de calidad.
Implicaciones para la política de enfermería y la política sanitaria:
La resiliencia está inversamente correlacionada con el burnout, la despersonalización y el agotamiento emocional. En consecuencia, las organizaciones sanitarias deberían desarrollar e implementar programas basados en la evidencia que fomenten la resiliencia de las enfermeras y reducir así su susceptibilidad al burnout.