Irak
Antecedentes y objetivos: El éxito de la restauración con carillas depende de la superficie dental, el grosor, el cemento y la preparación.
Preservar la estructura dental es vital para evitar la descementación y garantizar un buen pronóstico. Este estudio pretende explorar la fuerza de adhesión al cizallamiento de las carillas en función del nivel oclusal-gingival y la profundidad de corte de la superficie labial del esmalte, comparando sus tasas de éxito.
Métodos: Este estudio in vitro, realizado en el Shorsh Dental Teaching Hospital de Sulaymaniyah entre febrero y noviembre de 2023, consistió en la clasificación de treinta premolares superiores en tres grupos. Estos treinta premolares se distribuyeron a su vez en tres grupos, cada uno de los cuales constaba de 10 dientes. Cada diente se dividió en mitades oclusales y gingivales con fines de adhesión. En el Grupo 1 se realizó un tallado con fresa de diamante, en el Grupo 2 se utilizaron fresas guía de 0,5 mm de profundidad con alisado y en el Grupo 3 se emplearon fresas guía de 1 mm de profundidad con alisado. Posteriormente, se adhirieron a los dientes bloques de silicato de litio reforzados con zirconia al 10%, y se evaluó la resistencia de la adhesión al cizallamiento tras la cementación y el termociclado.
Resultados: El estudio comparó los valores entre las mitades oclusal y gingival dentro de los tres grupos. Se identificaron diferencias estadísticamente significativas en el Grupo 2 (P<0,05), donde la media más alta en G2O fue de 25,25, lo que indica variaciones notables entre los subgrupos oclusal y gingival. Sin embargo, no se observaron diferencias estadísticamente significativas en los Grupos 1 y 3 (P>0,05). La media de las mitades oclusales fue de 17,5 para el G1 y de 19,0 para el G3, mientras que las medias de las mitades gingivales se registraron como 12,0 para el G1 y 13,0 para el G3. La diferencia media más sustancial en la fuerza de adhesión relacionada con la profundidad de corte en las mitades oclusales se observó al comparar G2 con G1, con una diferencia de 7,75. Por el contrario, la diferencia media más baja se observó en G2 con G1. Por el contrario, la diferencia media más baja se observó en las mitades gingivales de G3 y G1, que fue de 1. Un análisis de los modos de fracaso reveló que 9 de cada 10 dientes de G1G, G1O y G2O presentaron fracaso de la cerámica adhesiva, lo que constituye aproximadamente el 15%. El grupo 3 mostró la mayor incidencia de fracaso adhesivo dental en la mitad gingival, con 6 dientes que mostraron este fracaso en G3G, lo que representa aproximadamente el 10%.
Conclusiones: La resistencia de adhesión al cizallamiento de las carillas está notablemente influenciada tanto por la profundidad de corte como por la ubicación de la preparación, ya sea en la región oclusal o gingival. Esta influencia en la fuerza de adhesión al cizallamiento puede ejercer un impacto sustancial en el resultado global del tratamiento.
Background and objectives: Veneer restoration success depends on tooth surface, thickness, cement, and preparation. Preserving tooth structure is vital to avoid debonding and ensure a good prognosis. This study aims to explore the shear bond strength of veneers based on the occlusal-gingival level and cutting depth of the enamel labial surface, comparing their success rates.
Methods: This in vitro study, conducted at Sulaymaniyah’s Shorsh Dental Teaching Hospital from February to November 2023, involved the classification of thirty upper premolars into three groups. These thirty premolars were further distributed across three groups, each consisting of 10 teeth. Each tooth was partitioned into occlusal and gingival halves for bonding purposes. In Group 1, diamond bur grinding was performed, Group 2 utilized 0.5 mm depth guide burs with smoothing, and Group 3 employed 1 mm depth guide burs with smoothing. Subsequently, 10% zirconia- reinforced lithium silicate blocks were bonded to the teeth, and the shear bond strength was assessed after cementation and thermocycling.
Results: The study compared values between the occlusal and gingival halves within the three groups. Statistically significant differences were identified in Group 2 (P<0.05), where the highest mean in G2O was 25.25, indicating noteworthy variations between the occlusal and gingival subgroups. However, no statistically significant differences were observed in Group 1 and Group 3 (P>0.05). The mean for the occlusal halves was 17.5 for G1 and 19.0 for G3, while the means for the gingival halves were recorded as 12.0 for G1 and 13.0 for G3. The most substantial mean difference in bond strength related to cutting depth on occlusal halves was observed when comparing G2 to G1, with a difference of 7.75.
Conversely, the lowest mean difference was noted on the gingival halves of G3 and G1, which was 1. An analysis of failure modes revealed that 9 out of 10 teeth in G1G, G1O, and G2O exhibited adhesive ceramic failure, constituting approximately 15%. Group 3 displayed the highest occurrence of adhesive tooth failure in the gingival half, with 6 teeth showing this failure in G3G, accounting for about 10%.
Conclusion: The shear bond strength of veneers is notably influenced by both the cutting depth and the location of the preparation, whether it is at the occlusal or gingival region. This influence on shear bond strength can exert a substantial impact on the overall treatment outcome.