Eva María Rillo Calvo, Marta Vicente Navarro, Beatriz Pérez Maicas, Noelia Polo Navarro, María Julia Bonilla García, Manuel Lebrón Pérez
Las crisis epilépticas son un motivo de consulta frecuente en los servicios de urgencias, llegando a suponer del 1% al 3% del total de ingresos1.
Se trata de una patología que puede tener múltiples causas, por lo que es importante establecer las causas subyacentes para su manejo postcrítico.
La Liga Internacional contra la Epilepsia (ILAE) definió la crisis epiléptica como la aparición transitoria de signos y/o síntomas provocados por una actividad neuronal anómala excesiva o simultánea en el cerebro2.
Epileptic seizures are a frequent reason for consultation in emergency services, accounting for 1% to 3% of total admissions1.
It is a pathology that can have multiple causes, so it is important to establish the underlying causes for its post-critical management.
The International League Against Epilepsy (ILAE) defined an epileptic seizure as the transient appearance of signs and/or symptoms caused by excessive or simultaneous abnormal neuronal activity in the brain2.