En la actualidad, existe una alta incidencia de infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria (IRAs), lo que provoca un aumento en la tasa de mortalidad y morbilidad de los pacientes, además de aumentar simultáneamente el gasto sanitario. El origen principal de estas infecciones radica en la creciente expansión de la resistencia a antibióticos (RA).
La causa principal de la resistencia a antibióticos es el uso indebido de estos en humanos, animales (y alimentos) y medio ambiente. En la actualidad, existen unos niveles alarmantes de RA, los cuales se traducen en mayor riesgo de fracaso terapéutico con antibióticos y mayor incidencia de infecciones por bacterias resistentes. Las bacterias adquieren resistencia mediante varios mecanismos moleculares, entre los que se encuentran los biofilms. De ahí, surge la necesidad de desarrollar nuevos antibióticos o alternativas terapéuticas como la terapia de bacteriófagos. Sin embargo, se requiere mayor número de investigaciones sobre estas nuevas alternativas. Afortunadamente, cada vez existe mayor evidencia y se están creando más acciones a nivel mundial