Si la epigastralgia y la inestabilidad hemodinámica aparecen sin avisar, con presteza hay que actuar

• Marina González Godoy ^[1] ; Juan Armando Molina Ortiz ^[2] ; Pablo Haro Preston ^[3]
  1. [1] Centro de Salud “Francia” (Fuenlabrada, Madrid)
  2. [2] Centro de Salud “Alicante” (Fuenlabrada, Madrid)
  3. [3] Hospital Universitario Fuenlabrada (Madrid)

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• Localización: FMC: Formación Médica Continuada en Atención Primaria, ISSN 1134-2072, Vol. 31, Nº. 1, 2024, págs. 26-28
• Idioma: español
• DOI: 10.1016/j.fmc.2022.01.020
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• Resumen

  • • La obesidad es una de las patologías más comunes en países industrializados.

    • El balón intragástrico es una opción terapéutica, no exenta de riesgos, con una complicación muy grave: la perforación intragástrica, llegando a provocar en algunas situaciones el fallecimiento del paciente.

    • En un paciente con antecedentes de colocación reciente de balón intragástrico y que comenta dolor abdominal, hay que incluir en el diagnóstico diferencial la perforación de víscera hueca.

    • Es elemental realizar campañas de formación para evitar que la población desarrolle obesidad y, por ende, todos los efectos perniciosos derivados de ella.