Ana V. Cintron Rodríguez
“Doctor … ya estoy bien, no me duele”. ¿Cuántas veces hemos escuchado estas palabras de parte de nuestros atletas? ¿Cuántas veces, sin necesariamente la aprobación del equipo médico de cuidado, nuestros atletas regresan a la práctica y a la competencia prematuramente después de una lesión deportiva? Sospecho que la respuesta de muchos será … “muchas veces”. ¿Cómo hacer entender no sólo a nuestros atletas sino también a algunos proveedores de la salud que la ausencia de dolor no es equivalente a una recuperación completa de una lesión deportiva? La evidencia en la literatura nos ha demostrado una y otra vez que una de las causas más importantes de la recurrencia en las lesiones deportivas es una rehabilitación incompleta.