Alejandra Belen Maldonado Gomez, Valerie Marianne Soruco Vera, Nelson Franco Condori Salluco, Johnny Brandon Merida Copa
El objetivo del presente estudio es analizar el papel de la microbiota intestinal en la progresión de la enfermedad de Parkinson, realizando una revisión bibliográfca. La enfermedad de Parkinson es una enfermedad neurodegenerativa que se produce por la degeneración de neuronas dopaminérgicas en la sustancia negra (pars compacta). La frecuencia de la enfermedad varía con la edad y el género, siendo más común en hombres mayores de 60 años. La causa principal de la muerte neuronal es desconocida y puede estar relacionada con procesos degenerativos como la disfunción mitocondrial, agregación de a-sinucleína, autofagia alterada, estrés del retículo endoplásmico (ER) o desregulación de la homeostasis del calcio intracelular. La microbiota intestinal es una parte integral del organismo humano y contribuye a muchos procesos fisiológicos, incluyendo la defensa inmunológica. La interacción entre la microbiota intestinal y el sistema nervioso central (SNC),se conoce como el eje microbiota-intestino-cerebro (MIC). La disbiosis intestinal, una alteración en la composición y función de la microbiota intestinal, se ha encontrado en personas con la enfermedad de Parkinson. Además, se ha demostrado que algunos compuestos producidos por la microbiota intestinal pueden tener propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que podrían ser beneficiosas en esta enfermedad. También se ha encontrado una relación entre la microbiota intestinal y la producción de dopamina, un neurotransmisor clave que se encuentra disminuido en las personas con Parkinson.