Objetivo:
Analizamos la importancia de las tecnologías digitales para las respuestas sanitarias durante la pandemia del COVID-19. Se identifican los beneficios, los retos y las barreras para el desarrollo de las capacidades digitales y se estudian estrategias para establecer una competencia digital duradera entre las enfermeras y los colegas de atención sanitaria adquirida durante la pandemia.
Antecedentes:
Desde mediados del siglo XX, los profesionales sanitarios han priorizado las tecnologías digitales de la información y la comunicación. La pandemia del COVID-19 aceleró la necesidad de adaptar la comunicación digital a entornos laborales clínicos peligrosos. Las políticas organizacionales permitieron que las capacidades digitales sustituyeran a los procesos presenciales, preservando al mismo tiempo el cumplimiento regulatorio, la protección y la seguridad de la información de los pacientes y el despliegue del personal.
Fuentes de evidencia:
Se accedió a toda la evidencia desde fuentes accesibles públicas.
Discusión:
La pandemia del COVID-19 fue un catalizador para implantar la Tecnología Servicios de atención potenciados. Los profesionales sanitarios necesitan capacidades digitales adecuadas para sus funciones y el ámbito de su práctica. La competencia en enfermería incluye habilidades tecnológicas. La combinación del Marco de Capacidades Digitales de Jisc y el Health and Care Digital de Salud y de Cuidados ayuda a los enfermeros a adquirir los conocimientos técnicos necesarios para la competencia clínica en los entornos sanitarios actuales. competencia clínica en los entornos sanitarios contemporáneos.
Conclusión:
La capacidad digital de la fuerza laboral sanitaria requiere políticas que doten tecnologías de recursos digitales y las habilidades individuales de los usuarios en entornos laborales peligrosos por el COVID-19. Todos los implicados deben estar al tanto de los cambios tecnológicos y supervisar la eficacia de la tecnología en la innovación de la atención al paciente, la formación profesional y la evidencia basada en la gestión de las enfermedades infecciosas en los sistemas sanitarios.
Implicaciones para la práctica y la política de enfermería:
Las enfermeras y otros profesionales en entornos comprometidos por el COVID-19 deben ser capaces de utilizar las tecnologías digitales integradas en la atención al paciente, la gestión clínica y la formación. Las políticas que aseguren recursos para que las enfermeras aprendan a utilizar las tecnologías digitales garantizarán que los sistemas digitales se actualicen con regularidad y que las enfermeras adquieran competencia en el uso de la tecnología en su práctica clínica. El rediseño del trabajo y del entorno laboral necesita sistemas informáticos y software compatibles que apoyen la innovación y la competencia digital de la enfermería.