Susana de Andrés Morera, A. Lucena Campillo, Paloma de Juana Velasco
Cada vez es más conocida la existencia de interaccio-nes de distintos fármacos entre sí y de éstos con la dieta.
Las estatinas son medicamentos ampliamente utilizados en la actualidad para el tratamiento de las hiperlipe-mias.
La dieta tiene gran influencia en la prevención y/o tratamiento de estas patologías ya que la estrategia tera-péutica que se emplea consiste en una dieta adecuada, y si esto no da resultado se inicia la terapia farmacológica siempre en combinación con la dieta. Por este motivo es necesario el conocimiento de las posibles interacciones entre este tipo de fármacos y los alimentos con el fin de evitar alteraciones en los efectos terapéuticos e incluso la aparición de efectos adversos. Todas las estatinas se absorben por vía oral por lo que es muy importante la influencia de la ingesta a la hora de la administración para alcanzar un adecuado efecto terapéutico. Muchas de las interacciones de las estatinas residen en su meta-bolismo a través del citocromo P-450 (excepto pravasta-tina) lo que facilita su posible interacción con determi-nados alimentos o componentes de los mismos, como es el caso del zumo de pomelo.
En este trabajo se hace una revisión de las interaccio-nes fármaco-nutriente con especial atención a las pro-pias de las estatinas y se describe el mecanismo de di-chas interacciones para así poder contribuir a evitarlas y mejorar de este modo el tratamiento en personas con hiperlipemias.