Carolina Rosende Bautista, Francisco Alonso-Tajes, María Reina-Bueno , Sergio Pérez García , Teresa Seoane Pillado
Objetivo: Analizar en población adulta cómo la morfología del arco longitudinal interno y la posición del pie determina la capacidad funcional y se relaciona con dolor.
Pacientes y métodos: Se realizó un estudio observacional descriptivo en una población adulta (n = 423 sujetos), que otorgó un nivel de confianza del 95 % y permitió una precisión de ± 5 % en las estimaciones de las variables de interés. La morfología/altura del arco longitudinal interno se determinó mediante la obtención de dimensiones antropométricas normalizadas y morfología de la huella plantar y el Foot Posture Index 6 se utilizó para determinar la postura del pie. Las puntuaciones obtenidas en el Cuestionario de Manchester determinaron el grado de dolor y la disfunción del pie. Se realizó un análisis descriptivo de las variables sociodemográficas y clínicas de los sujetos estudiados. En el análisis bivariado y multivariado de regresión logística se determinó qué variables se relacionan con el dolor y la función del pie, estimando valores crudos y ajustados de odds ratio (OR).
Resultados: En la dimensión Función, ser mujer (OR ajustado = 2.62 [IC 95 % 1.55-4.44, p < 0.001]) y presentar al menos un pie pronado o muy pronado (OR ajustado = 1.98] IC 95 % 1.17-3.37 p = 0.011]) se manifestaron como factores independientes que influían en la obtención de puntuaciones superiores a la mediana de funcionalidad. En la dimensión Dolor la edad (OR Ajustado = 1.02; IC 95 % [1.01-1.03, p < 0.05]), ser mujer (OR Ajustado = 2.52, IC 95 % [1.52-4.19, p < 0.001]) y presentar una morfología de huella plana (OR Ajustado = 2.10, IC 95 % [1.21-3.67 p < 0.05]) fueron las variables significativas para pertenecer al grupo con puntuaciones superiores a la mediana.
Conclusiones: En la población estudio, ser mujer y presentar posiciones en pronación aumentan la probabilidad de puntuaciones elevadas en discapacidad funcional. En la dimensión Dolor, la probabilidad de obtener puntuaciones elevadas aumenta con la edad, la pertenencia al sexo femenino y poseer morfología de huella plana.
Objective: The aim of the study was to analyze how the medial longitudinal arch morphology and the foot position determines functional capacity and its relation to pain in adult population.
Materials and methods: an observational cross-sectional study was carried out in an adult population of n = 423 subjects, α = 0,05; precision ± 5 % in the estimates of the variables of interest. Medial longitudinal arch morphology/height was determined obtaining normalized anthropometric dimensions and footprint morphology according to an arch index. Foot Posture Index-6 was used to determine foot posture. The degree of foot pain and dysfunction was obtained by using the Manchester Foot Pain and Dysfunction Questionnaire. A descriptive analysis of the sociodemographic and clinical variables of the subjects was performed. In the bivariate and multivariate logistic regression analysis, it was determined which variables were related to pain and foot function, estimating raw and adjusted values of odds ratio (OR).
Results: In the function dimension, female sex (OR adjusted = 2.62 95 % IC 1.55-4.44, p < 0.001) and having at least one foot pronated or very pronated, (OR adjusted = 1.98; 95 % IC 1.17-3.37, p = 0.011), appeared as independent factors that influenced obtaining scores above the median. In the pain dimension, age (OR adjusted =1.02; 95 % IC 1.01-1.03, < 0.05), female sex (OR adjusted = 2.52, 95 % IC 1.52-4.19, p < 0.001) and presenting flat footprint morphology (OR adjusted = 2.10, 95 % IC 1.21-3.67, p < 0.05) were the significant variables to the group with scores higher than the median.
Conclusions: Being a woman and having pronated positions increase the probability of higher scores when evaluating dysfunctional disabilities. In the pain dimension, the probability of obtaining higher scores increases with age, female sex and having a flat footprint morphology.