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Adolfo Romero Ruiz 
, Javier Tronchoni de los Llanos
Parece que la mayoría de las enfermeras tienen asimilada la importancia de obtener muestras sanguíneas utilizando sistema de vacío (SV). No obstante, en el entorno más próximo de los autores se ha detectado aun cierta renuencia a utilizarlo, prefiriendo el sistema clásico con jeringuilla (J). Nos preocupa tanto el desarrollo de nuestra labor en estos ámbitos como el poder llevarla a cabo con la profesionalidad necesaria y dentro de los márgenes de seguridad deseados. Con respecto a ello, parece indispensable adoptar de manera definitiva la toma de muestra sanguínea por SV. Estos antecedentes nos hacen plantear como objetivo conocer el grado de aceptación de los diferentes sistemas de toma de muestra sanguínea por las enfermeras de nuestro centro. Se diseña un estudio descriptivo transversal mixto. Se entregaron 75 encuestas a enfermeros seleccionados aleatoriamente del área de extracciones y hospitalización, siendo contestadas 53 (grado de cumplimiento 70 %). Se analizaron los estadísticos descriptivos obtenidos de los resultados ofrecidos por las encuestas. Las aportaciones realizadas por los profesionales en las preguntas abiertas del formulario fueron valoradas siguiendo técnicas de investigación cualitativa. Se halló una mayoritaria preferencia por J, a pesar de conocer los riesgos asociados a su uso y de conocer que el SV es más seguro. Se aprueba con notable a J y con un 5 escaso a SV. No hay diferencias entre extracciones ambulatorias y plantas. Concluimos que es necesario un cambio cultural para conseguir alterar esta tendencia. Se estudiarán diversas alternativas para ello.
It seems that nurses knows perfectly the vacuum blood sampling system (VBS) but we detect some difficulties to use it into our hospital staff, preferring our clinical nurses the classical syringes (S), despite knowing the risks associated to this procedure. We designed a prospective transversal mixed study making a practitioner´s survey into a sample of nurses proceeding from hospitalisation and laboratories personnel. We found descriptive statistical data: majority of the nurses preferred S, although they have knowledge of its associated risks. They approved with C VBS, and with B the S. We found no statistical differences between hospitalisation and laboratories staff. We conclude that maybe cultural approaches could change tendencies and classical performances of our nursing staff. It is possible that veterans remains conservative, but we didn´t found differences between hospitalisation and laboratories nursing personnel. We shall study different strategies for promote cultural changes.
