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Objetivos: comprobar la frecuencia del pie cavo en una población pediátrica no seleccionada el porcentaje de formas secundarias y establecer criterio de remisión al especialista.
Material y métodos: estudio aleatorio de 948 niños sanos mayores de 4 años a los que se estudió la huella plantar mediante podoscopio.
Resultados: presentaron pie cavo de distinto grado el 16,3% de los estudiados, con diferencia estadísticamente significativa a favor de las niñas. Hubo antecedentes familiares en el 60%. Presentaron síntomas y/o signos exploratorios anormales el 19,3%, principalmente dolor, cojera y dermatitis plantar. Fueron remitidos al especialista el 7,7% de los diagnosticados, confirmándose el diagnóstico en el 75% e instaurándose tratamiento en el 50%. No hubo ningún caso de pie cavo secundario.
Conclusiones: el pie cavo es muy frecuente en niños sanos, tiene carácter familiar y sólo excepcionalmente obedece a causa neuro-muscular.
Se proponen cuatro criterios de selección para remitir al especialista.
