Introducción. Actualmente el sector salud tiene conciencia de que la problemática de su población adolescente es compleja, difusa e inespecífica, existen problemas como la pobreza, la ruralidad, el escaso acceso a la educación, la maternidad temprana, a los que se unen problemas nuevos, como el aumento en número absoluto y relativo de adolescentes especialmente de áreas urbanas, y en especial en las poblaciones marginales. En estas circunstancias, los adolescentes y jóvenes no encuentran mayores oportunidades y en cambio son confrontados por nuevos estímulos psicológicos y sociales, que al no poder manejarlos adecuadamente, originan problemas de salud como: el abuso de sustancias que producen adicción, alcohol, tabaco, inhalantes; accidentes, infecciones de transmisión sexual y el sida. Objetivos Promover el desarrollo de una sexualidad sana, como componente del desarrollo humano, por medio de un Programa en Educación Sexual y Salud Reproductiva, dirigido a adolescentes de VI Grado, Escuela Cristiana Asambleas de Dios, en Limón. Metodología, En la ejecución de la práctica dirigida se utilizó el taller educativo que utiliza las estrategias participativas, ya que en ella se describieron datos de las personas, en las palabras habladas o escritas. Esta practica se desarrollo siguiendo las estas de coordinación, diagnostico de necesidades, planificación y organización, ejecución y evolución. Resultados se puede observar que los conocimientos que poseen los adolescentes de diferentes barrios cercanos, no difiere mucho, ya que ambos tienen las misma dudas con respecto al tema de la sexualidad. Los conocimientos que los adolescentes han adquirido dentro del sistema educativo, refuerzan fundamentalmente aspectos biológicos de la sexualidad humana. Se pudo evidenciar que 23 de los participantes modificaron sus conocimientos sobre el concepto del sexo, ya que éste es un término que sirve para clasificar el género en masculino–femenino y no se refiere a las relaciones coitales. Conclusiones Es de suma importancia que se abran espacios como talleres y atención individualizada, que promuevan una sexualidad humana sana a nivel de la educación primaria, ya que el desarrollo saludable va a depender de la orientación que los y las jóvenes reciban Con el desarrollo de estos programas en forma continua, se prepara a los y las adolescentes desde edades muy tempranas para la toma de decisiones, lo que tendría su impacto directo en la prevención del embarazo a estas edades y de las infecciones de transmisión sexual.