Soto Luis Fernando
Introducción. La sexualidad es un tema que está en boga, programas televisivos, radiales y la prensa escrita lo testifican, de igual manera se observa a través de la publicación de reportajes, estudios, investigaciones y demás, ya que seduce y atrae. En parte debido, a la necesidad que reconocen las personas de educarse en cuanto al tema, pero principalmente porque es interesante, maravillosa, fascinante e inherente al ser humano. Objetivo. Desarrollar un programa de educación sexual, dirigido a adolescentes sordos y sordas, que facilite a través del proceso la construcción de una nueva y más positiva concepción de sexualidad, en el Colegio México, durante el periodo que comprende de marzo a setiembre del 2004. Metodología. La presente Práctica Dirigida se estructuró en tres fases que antecedieron la realización de este programa de educación sexual, cada una de las cuales necesarias para conocer como se dieron los inicios de esta investigación. Fases previas a la realización del Programa: Etapa de sensibilización sobre el tema. Primer contacto con la población de adolescentes sordos y sordas. Fase de Coordinaciones. Resultados. El conocer a los y las protagonistas de este estudio es básico, ya que permite a las personas oyentes, aprender sobre una cultura poco explorada, la cultura sorda costarricense. Uno de los rasgos más característicos dentro de una cultura es la familia, pues representa una organización fundamental en el desarrollo del individuo, siendo la responsable de grabar desde corta edad en las personas una enseñanza que influye a lo largo de su vida, especialmente para esta investigación en la forma de vivir la sexualidad. Conclusiones. Como investigador, persona oyente y conocedor moderado de la cultura sorda y su lenguaje, no se puede ni se podrá formar parte de esta cultura, pues no se posee una condición de sordera. Lo que sucede es que al compartir costumbres, objetivos, metas, conocimientos y sentimientos en común se pasó a formar parte de la comunidad sorda. Es esencial que oyentes y sordos trabajen en conjunto, un o una profesional en enfermería pueden impartir la capacitación que requieren estas personas sordas en cuanto a sexualidad, así como la participación dentro del grupo que trabaja en la confección de los programas.