Dentro del equipo de trabajo que gestiona incidentes críticos, las personas pueden actuar como catalizador del cambio, promoviendo conscientemente un avance hacia la mejora de la calidad de la atención y de la seguridad del paciente. La mayoría de los errores médicos son atribuidos a un fallo en las habilidades no técnicas como son la comunicación, el trabajo en equipo y el liderazgo, entre otros.
Se presenta un caso clínico de gran complejidad, para analizar la actuación interdisciplinar ante una emergencia de cirugía cardiaca en una unidad de cuidados intensivos (UCI), utilizando para ello la herramienta Team Strategies and Tools to Enhance Performance and Patient Safety-TeamSTEPPS.
La experiencia, narrada mediante la Guía CARE de casos clínicos, consiste en asistir una reintervención de cirugía cardíaca por parte de personal del quirófano de urgencias (QxU), pero fuera del bloque quirúrgico en el que habitualmente tiene lugar su actividad diaria.
Precisó la reapertura de la Cirugía extracorpórea (CEC) en la UCI de manera emergente, con reanimación y colocación de Extracorporean Membrane Oxygenation (ECMO), implicando la actuación de diferentes profesionales como médicos intensivistas de diferentes especialidades, enfermero perfusionista y enfermeras tanto de UCI como del quirófano de urgencias, entre otras.
El análisis del funcionamiento del equipo fue un liderazgo compartido adecuado, aunque sin debriefing posterior inmediato. La principal carencia que se encontró está relacionada con el ámbito comunicativo, ya que no se cerraron los bucles comunicativos. En el apoyo mutuo se utilizó la Advocacy and Assertion y el Two-Challenge Rules y, se aplicó la herramienta CUS como medida correctiva ante la aparición de un evento centinela. Con respecto a la monitorización de la situación se consideró el Cross Monitoring y la herramienta STEP, teniendo en cuenta que, el entorno hostil y altamente estresante dificultó la actuación.