Alicante, España
Objetivo principal: el objetivo de esta investigación es describir los hábitos de consumo alimentario y determinar qué variables sociodemográficas, dentro del colectivo de los estudiantes jóvenes universitarios, están implicadas en la elección de los alimentos. Metodología: se aplicó un cuestionario ad hoc, anónimo y auto-administrado a 599 estudiantes de la Universidad de Alicante, matriculados en el curso académico 2018/2019. Resultados principales: los resultados muestran que los jóvenes universitarios concentran sus ingestas en la comida (90,2%) y la cena (82%). Se evidenció, además, que los alimentos incluidos en la dieta mediterránea se consumen dos o tres veces por semana en esta población, pero en porcentajes diferentes. Los datos confirman que los educados en un estilo democrático consumen, en un 59%, alimentos enriquecidos con vitaminas y minerales por encima de otros estilos educativos familiares. De los estudiantes que afirmaban consumir alimentos precocinados un 51,9% pertenecen a un estilo educativo democrático, un 32,3% al permisivo, un 14,6% al autoritario y un 1,2% al negligente, lo que confirma la influencia de la cultura educativa familiar en los hábitos de alimentación de este grupo etario para esta variable. Conclusión principal: se concluye que las pautas definitorias de la dieta mediterránea han perdido protagonismo en este grupo poblacional, al comparar sus resultados con los de otros momentos históricos. Además, los resultados obtenidos muestran que los estilos de crianza no influyen de forma determinante en la elección de la alimentación en la etapa universitaria, a excepción del consumo alimentos precocinados.
Objective: the objective of this research is to describe food consumption habits and determine which sociodemographic variables, within the group of young university students, are involved in the choice of food. Methods: an ad hoc, Anonymous and self-administered questionnaire was applied to 599 students from the University of Alicante, enrolled in the 2018/2019 academic year. Results: the results show that university students concentrate their intakes at lunch (90.2%) and dinner (82%). It was also shown that the foods included in the Mediterranean diet are consumed two or three times a week in this population, but in different percentages. The data confirm that those educated in a democratic style consume, in 59%, foods enriched with vitamins and minerals above other family educational styles. Of the students who claimed to consume precooked foods, 51.9% belong to a democratic educational style, 32.3% to permissive, 14.6% to authoritarian and 1.2% to negligent, which confirms the influence of family educational culture in the eating habits of this ade group for this variable. Conclusions: it is concluded that the defining guidelines of the Mediterranean diet have lost prominence in this population group, when comparing their results with those od other historical moments. In addition, it is confirmed that the defining guidelines of the Mediterranean diet have been losing prominence along the years.