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Belén González Alcantud, Daniel Díez Moreno, Qi Ling Ye, Saray López Tornero, Itziar Pérez Álvarez
Se presenta el caso de una mujer de 32 años ingresada tras intervención de plastia tricuspídea y Glenn bidireccional por enfermedad de Ebstein. Se realizó una valoración al ingreso según las 14 Necesidades de Henderson. El plan de cuidados (PC) se efectuó siguiendo el modelo AREA. Se creó una red de razonamiento que identifica la convergencia de la relación entre los diagnósticos NANDA para priorizar aquellos con mayor concentración de actividad. De estos diagnósticos se extrajeron objetivos NOC e intervenciones NIC con sus correspondientes actividades, y se analizó el resultado teniendo en cuenta la evolución de la paciente para replantear el PC. Los diagnósticos priorizados fueron “Limpieza ineficaz de las vías aéreas”, “Disminución del gasto cardiaco”, “Deterioro de la integridad cutánea”, “Deterioro de la movilidad física” y “Riesgo de infección”. Tras la reevaluación-reflexión se excluyeron “Limpieza ineficaz de las vías aéreas” y “Deterioro de la integridad cutánea” por haberse resuelto, se sustituyó la “Disminución del gasto cardiaco” por “Déficit de volumen de líquidos” que se ajustaba mejor y se incluyó el diagnóstico “Dolor agudo”. Tras modificar el PC, todos los indicadores alcanzaron la puntuación diana establecida no quedando ningún objetivo sin resolver.
