La religión tiene una enorme influencia sobre la formación de la tradición relacionada con el alcohol. El bajo nivel de consumo de alcohol en los países musulmanes puede ser un ejemplo clásico de la influencia protectora de la religión en los problemas relacionados con el alcohol. Varios estudios han analizado la influencia relativa de dos variables que influyen en el consumo de bebidas alcohólicas: la religión y la cultura. Para arrojar más luz en esta cuestión, hemos investigado el consumo de alcohol de los musulmanes en un país donde el nivel de consumo de alcohol es muy elevado y, por ese motivo, existe un alto porcentaje de problemas relacionados con el alcohol. Hemos estudiado los modelos de consumo de alcohol de los estudiantes musulmanes -procedentes de Siria, Kuwait, Líbano y Palestina- de la facultad de Medicina de la Universidad de Grodno. Medición: Una muestra de 358 estudiantes árabes varones de religión musulmana elegidos al azar empleando cuestionarios AUDIT, MAST y CAGE , así como ICD-10. Resultados: Según las actitudes de los estudiantes hacia el alcohol, se distribuyeron en tres grupos. El 55% eran abstemios. Un 30% no tenían problemas con el alcohol. El 15% restante estaban en el grupo con problemas, al menos según uno de los cuestionarios. La investigación pone de manifiesto las siguientes diferencias en las pautas de consumo de alcohol entre estudiantes de distintos cursos y edades: en el primer y segundo año consumen alcohol un 14%; entre el tercero y el cuarto, un 35%; entre el quinto y el sexto, un 63%. Conclusión: Los estudiantes musulmanes asimilan ciertos elementos de la cultura extranjera en general, y de su tradición relacionada con el consumo de alcohol en particular. Los resultados de este estudio confirman la importancia de la religión y de los factores culturales en la formación de un modelo de consumo de alcohol. Asimismo, parece que el predictor más poderoso de los problemas relacionados con el alcohol no es la formación religiosa sino el entorno social existente.