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La conciliación es algo más que “cosa de mujeres” o el equilibrio entre la vida personal y profesional. Es el derecho de todas las personas a desarrollar una trayectoria vital, social, profesional y familiar plena. En la Enfermería estas políticas son indispensables al ser un colectivo vulnerable que sufre 9 de los 12 factores laborales de conciliación que según el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo afectan a la vida familiar y personal. La pandemia ha endurecido las exigencias laborales y la demanda de cuidados enfermeros, al mismo tiempo que han aumentado las cargas de cuidado fuera del entorno profesional. Con el objetivo de analizar las consecuencias de la falta de Políticas de Conciliación de los profesionales de Enfermería se plantea la hipótesis de que su conciliación ha empeorado con la pandemia, objetivando un grave problema en este grupo, particularmente vulnerable, mediante un estudio descriptivo transversal de los/as enfermeros/as trabajadores en España. Un 69% de las enfermeras cree que su conciliación es mala o muy mala, mucho peor que el 2018. Con el desarrollo de políticas, estrategias y medidas específicas que posibiliten la Conciliación Enfermera, aumentaría la fuerza laboral de los profesionales y la oferta de cuidados, y no redundaría en el empeoramiento de la Crisis de Cuidados.
Work-life balance is more than a women's concern, or a balance between personal and professional life. It means the right of all people to develop a full social, professional and family life. In nursing, these policies are essential, because it is a vulnerable group that suffers from 9 of the 12 work-life balance factors that, according to the National Institute for Health and Safety at Work, affect family and personal life. The impact of the pandemic has increased work demands and the demand for nursing care, while at the same time increasing the burden of care outside the professional field. To analyse the consequences of the lack of work-life balance policies for nursing professionals, we hypothesised that their work-life balance has been worsened by the pandemic, and identified a serious problem in this particularly vulnerable group through a cross-sectional descriptive study of working nurses in Spain. We found that 69% of nurses believe that their work-life balance is bad or very bad, much worse than in 2018. With the development of specific policies, strategies and measures to enable Work-Life Balance for Nurses, the professional workforce and the supply of care would increase, and the worsening of the Care Crisis would not occur
