Brasil
Introducción: se ha observado una disminución del rendimiento cognitivo en los pacientes con obesidad grave. La cirugía bariátrica y la pérdida de tejido adiposo parecen mejorar el funcionamiento cognitivo; sin embargo, los predictores de mejora no están bien establecidos.
Objetivos: evaluar el rendimiento cognitivo y el estado nutricional de pacientes con obesidad severa después de 6 meses de una cirugía bariátrica.
Métodos: evaluamos el desempeño neuropsicológico de 22 pacientes con un índice de masa corporal ~ 42,9 kg/m². Se analizaron las pruebas de rutina realizadas al inicio y después de la cirugía. Calculamos la correlación con la evaluación neuropsicológica y los biomarcadores sanguíneos.
Resultados: los pacientes no mostraron deterioro cognitivo en la evaluación preoperatoria, pero sí un rendimiento por debajo del estándar. Los pacientes mostraron una pérdida de peso significativa 6 meses después de la cirugía (~ 22 kg), con un cambio de la clasificación de obesidad de III a I. Además, los pacientes mostraron una mejora significativa de la atención, la flexibilidad mental, el control inhibitorio y la velocidad de procesamiento. Además, observamos una mejora significativa del ácido fólico sérico (108 %), la gamma-glutamil-transferasa (-41 %), el ácido úrico (-32 %), la ferritina (-28 %), los triglicéridos (-19 %) y las lipoproteínas de alta densidad (9 %). Finalmente, encontramos una correlación positiva moderada entre la velocidad de procesamiento y el peso corporal (r = 0,46) y la gamma-glutamil-transferasa (r = 0,54), y entre la proteína total y la flexibilidad mental (r = 0,75).
Conclusiones: la cirugía bariátrica promovió una pérdida de peso significativa y mejoró la atención, la flexibilidad mental, la velocidad de procesamiento y varios biomarcadores nutricionales. Sin embargo, tuvo efectos limitados sobre otras funciones cognitivas, como la memoria y el lenguaje a corto y largo plazo
Background: reduced cognitive performance has been observed in patients with severe obesity. Bariatric surgery and subsequent adipose tissue loss seem to affect cognitive functioning positively; however, improvement predictors are not well established.
Aim: to evaluate the cognitive performance and the nutritional status of patients with severe obesity 6-month after bariatric surgery.
Methods: we assessed the neuropsychological performance of 22 patients with obesity (body mass index: ~ 42.9 kg/m²). The nutritional evaluation consisted of the routine tests performed in the baseline and postoperative periods. Lastly, we calculated the correlation between neuropsychological assessment results and blood biomarkers.
Results: the patients did not present cognitive impairment in the preoperative assessment, but performed below the standard range. The patients underwent significant weight loss after 6 months from surgery (~ 22 kg), with a change in obesity class III to I. Also, the patients presented a significant improvement in attention, mental flexibility, inhibitory control, and processing speed. Additionally, we observed a significant improvement in serum folic acid (108 %), gamma-glutamyl transferase (-41 %), uric acid (-32 %), ferritin (-28 %), triglycerides (-19 %), and high-density lipoprotein (9 %). Lastly, we found a moderate positive correlation between processing speed and body weight (r = 0.46), gamma-glutamyl transferase (r = 0.54), and total protein and mental flexibility (r = 0.75).
Conclusion: bariatric surgery promoted significant weight loss and improved attention, mental flexibility, processing speed, and several nutritional biomarkers. Nevertheless, the surgery had limited effects on other cognitive functions such as short- and long-term memory and language.