Luis Miguel Pérez Belmonte, Julio Osuna-Sánchez, Juan Ignacio Rico Robles, Michele Ricci, José Pablo Lara Muñoz , Ricardo Gómez Huelgas
Fundamentos y objetivos La hiperglucemia hospitalaria se maneja preferiblemente con insulina. Nuestro objetivo fue analizar la eficacia glucémica, simplificación del tratamiento y seguridad de los regímenes hospitalarios de manejo de la hiperglucemia (insulina basal-linagliptina versus insulina basal-bolo) en pacientes con diabetes mellitus de tipo 2 ingresados por insuficiencia cardíaca descompensada.
Material y métodos En este estudio de vida real, se incluyó a pacientes con hiperglucemia leve/moderada manejados con nuestros regímenes entre 2016 y 2018. Para emparejar a los pacientes que comenzaban alguno de los regímenes se usó un análisis de propensiones.
Resultados Tras el análisis de propensiones, 146 pacientes fueron incluidos en cada grupo. No hubo diferencias en los niveles de glucosa medios (163,6±21,2 vs. 159,6±19,2mg/dl; p=0,210). Los pacientes con el régimen de insulina basal-linagliptina tuvieron menos hipoglucemias (36 vs. 64; p<0,001), menos insulina total (24,1±5,3 vs. 32±5,6 unidades; p<0,001) y menos inyecciones diarias (2,4±0,8 vs. 4±0; p<0,001) que los pacientes del régimen basal-bolo.
Conclusiones El régimen de insulina basal-linagliptina fue seguro, simple y eficaz y podría ser considerado como tratamiento de referencia para estos pacientes vulnerables y con alta complejidad clínica, con lo que se simplificaría el manejo hospitalario.
Introduction and objectives Hyperglycaemia in hospitalized patients with type 2 diabetes is preferably managed with insulin. We aimed to analyse the glycaemic efficacy, treatment simplicity, and safety of our hospital's antihyperglycemic regimens (linagliptin-basal insulin versus basal-bolus insulin) in patients with type 2 diabetes admitted for heart failure decompensation.
Patients and methods In this real-world study, we included patients with mild-to-moderate hyperglycaemia managed with our antihyperglycemic regimens between 2016 and 2018. To match patients who started one of the regimens, a propensity matching analysis was used.
Results After propensity matching, 146 patients were included in each group. There were no differences in mean blood glucose levels (163.6±21.2 vs 159.6±19.2mg/dl, p=.210). Patients on the linagliptin-basal insulin regimen had a lower total number of hypoglycaemic episodes (36 vs 64, p<.001), lower total insulin dose (24.1±5.3 vs 32.0±5.6 units, p<.001), and lower number of daily injections (2.4±.8 vs 4.0±.0, p<.001) than those on the basal-bolus regimen.
Conclusions Linagliptin-basal insulin was a safe, simple, and efficacious regimen and could be considered standard of care for these vulnerable, high complex patients to simplify in-hospital management.