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Alicia Moreno Arjol, Cristina Cubero Esteban, Natalia Minguillón Ruiz, Mª Ángeles Casaus Margeli, Lucia Belloc Pérez
A pesar de las creencias anteriores, se ha demostrado que los neonatos sí que sienten dolor y que además lo hacen de forma más intensa que los adultos. Desde su nacimiento el neonato está expuesto a numerosas técnicas dolorosas, como la venopunción o la punción del talón, por lo que el personal de enfermería es responsable de identificar y manejar adecuadamente el dolor.
Uno de los métodos más empleados es el uso de la sacarosa oral previa a la intervención dolorosa, pues se ha demostrado su seguridad y eficacia analgésica, reduciendo el llanto, los movimientos y las muecas faciales del neonato.
Despite the previous beliefs, it has been shown that neonates do feel pain and that they also do it more intensely than adults. From birth, the newborn is exposed to numerous painful techniques, such as venipuncture or heel stick, so the nursing staff is responsible for identifying and appropriately managing pain.
One of the most widely used methods is the use of oral sucrose prior to the painful intervention, since its safety and analgesic efficacy has been demonstrated, reducing the crying, movements and facial grimaces of the newborns.
