Entre el 5 y el 10% de los pacientes que ingresan en un entorno hospitalario desarrollará una enfermedad que habrá sido contraída en dicho ambiente. Esta patología, adicional a la que provocó el ingreso hospitalario del paciente, tiene importantes repercusiones tanto a nivel clínico del mismo, como a nivel económico dentro del sistema sanitario responsable de sus cuidados1. Para dar solución a este problema existen sistemas de vigilancia epidemiológicos como es el caso de EPINE (Estudio de Prevalencia de las Infecciones Nosocomiales de España). En el presente artículo monográfico se desglosan los datos más reseñables de su última versión publicada, referente al año 2019, y se desarrollan las implicaciones clínicas que puede tener.
Between 5 and 10% of patients admitted to a hospital environment will develop a disease that was contracted in such an environment. This pathology, in addition to that which caused the patient to be admitted to hospital, has important repercussions both clinically for the patient and economically for the healthcare system responsible for their care1. Epidemiological surveillance systems such as EPINE (Estudio de Prevalencia de las Infecciones Nosocomiales de España) exist to solve this problem. This monographic article breaks down the most important data from its latest published version, referring to the year 2019, and develops the clinical implications it may have.