Los pacientes con neoplasias presentan una elevada incidencia de alteraciones tromboembólicas y/o trombohemorrágicas. La activación de la coagulación sanguínea en los procesos tumorales es un fenómeno complejo que implica rutas muy diferentes del sistema hemostático, así como numerosas interacciones de las células tumorales con otros tipos celulares sanguíneos. Además, la formación de fibrina está igualmente asociada a los procesos de diseminación tumoral y metástasis. El factor tisular, considerado el iniciador fisiológico de la coagulación, es también un factor determinante en la regulación del avance de los procesos tumorales. De hecho, existe una correlación directa entre la expresión del factor tisular y la síntesis del factor de crecimiento endotelial vascular, citocina multifuncional responsable de la angiogénesis tumoral. Durante la última década, se han desarrollado diversos compuestos alternativos al uso de los fármacos antitumorales convencionales. Dichas moléculas son reguladoras específicas de rutas intracelulares relacionadas con los procesos trombóticos y angiogénicos, y se hallan en muchos casos en fase de ensayo clínico para su administración en pacientes neoplásicos.