Que la investigación supone la profundización sistematizada en el conocimiento de un determinado aspecto de una temática que permite obtener resultados y conclusiones seguras y fiables, es un hecho conocido y aceptado de manera general.
Que este es el motivo por el que la investigación debe seguir los principios establecidos en el método científico, incorporando la necesaria seriedad y rigurosidad requerida en el desarrollo de todos los pasos, es también una realidad plasmada:
“La investigación es una búsqueda de conocimiento ordenada, coherente, de reflexión analítica y confrontación continua de los datos empíricos y el pensamiento abstracto, a fin de explicar los fenómenos de la naturaleza” (Rojas Soriano).
Esta profundización en el conocimiento existente en un momento determinado es la que explica que los trabajos de investigación se puedan establecer para conocer algo que se desconoce, para confirmar lo conocido hasta ese momento o para profundizar en lo conocido hasta ese momento.
Por otra parte, el ámbito concreto de conocimiento en el que se establece el motivo del estudio es el que permite catalogar el tipo de investigación que se está desarrollando, y en el que se va a generar nuevo conocimiento.
De esta manera, la investigación que se establece en el ámbito del cuidado y genera conocimiento de enfermería se denomina investigación de enfermería:
“Es la investigación sistemática de la práctica de la Enfermería y del efecto de su práctica en el cuidado del paciente, de la familia o la comunidad” (Notler y Hott).
“La investigación en enfermería se centra primordialmente en el desarrollo del conocimiento sobre la enfermería y su ejercicio, incluida la atención a las personas sanas y enfermas. Va dirigida a la comprensión de los mecanismos fundamentales que afectan a la capacidad de las personas y las familias para mantener o incrementar una actividad óptima y minimizar los efectos negativos de la enfermedad» (C.I.E.) Este es un aspecto básico y fundamental que deben plantearse como punto de partida todos los investigadores y grupos de investigación de enfermería a la hora de diseñar sus estudios: la formulación del problema de investigación debe ser de Enfermería.
Parece algo obvio, pero en la práctica es más frecuente de lo deseado encontrar trabajos de investigación desarrollados por profesionales de enfermería que generan conocimiento de otras disciplinas.
La valoración clínica de enfermería es uno de los muchos resultados que esta investigación de enfermería es capaza de generar.
El grupo de investigación CENES viene trabajando desde hace más de 10 años en el desarrollo del conocimiento de enfermería en el marco del cuidado, habiendo centrado en los últimos años sus trabajos en generar respuestas a algunas de las principales cuestiones planteadas en el ámbito de la valoración enfermera.
Si ya en el año 2006 elaboró la primera clasificación de variables normalizadas del cuidado, ahora ha definido el concepto de la valoración clínica de enfermería en respuesta a la necesidad de enfocar su labor a su ámbito propio de actuación: el cuidado.
Esta necesidad ha sido detectada y expresada en numerosos foros científicos de la profesión, y ya fue expresada por la NANDA-I en su publicación, indicando:
“Las enfermeras necesitan valorar a los pacientes desde el punto de vista de la disciplina enfermera para poder diagnosticar de forma precisa y proporcionar cuidados eficaces” (NANDA-I. 2015-2017.
Los resultados del desarrollo de este concepto de “valoración clínica de enfermería” ya fueron presentado en el último congreso internacional del CIE en Barcelona, definiéndola como “la valoración específica que realiza el profesional de enfermería, enfocada expresamente al cuidado y su aplicación a través del modelo profesional de enfermería (metodología enfermera) La valoración clínica de enfermería forma parte del proceso de razonamiento lógico definido para la aplicación de los cuidados profesionales mediante metodología enfermera, y su objetivo es conocer la efectividad de los cuidados de la persona, familia o comunidad en un momento determinado.
El desarrollo de este concepto, junto con la disposición de una taxonomía de variables normalizadas de enfermería, coloca a la enfermería en disposición de dispone de protocolos de valoración normalizados que informen del grado de fiabilidad diagnóstica del juicio clínico emitido (diagnóstico de enfermería), lo que supone un logro de grandes dimensiones en la seguridad del paciente del que sólo la enfermería está en disposición de poder desarrollar en la actualidad.
Esperamos que este proyecto pueda tener la continuidad y el apoyo necesario para hacer realidad este gran avance.
Antonio Arribas Cachá
That research implies the systematized deepening in the knowledge of a certain aspect of a subject that allows obtaining safe and reliable results and conclusions, is a generally known and accepted fact.
That this is the reason why research must follow the principles established in the scientific method, incorporating the necessary seriousness and rigor required in the development of all the steps, is also a reality embodied:
"Research is an orderly, coherent search for knowledge, of analytical reflection and continuous confrontation of empirical data and abstract thought, in order to explain the phenomena of nature" (Rojas Soriano).
This deepening of existing knowledge at a given moment is what explains that research work can be established to know something that is unknown, to confirm what has been known up to that moment or to deepen what has been known up to that moment.
On the other hand, the specific field of knowledge in which the reason for the study is established is what makes it possible to catalogue the type of research that is being developed, and in which new knowledge will be generated.
Thus, research that is established in the field of care and generates nursing knowledge is called nursing research:
"It is the systematic investigation of Nursing practice and the effect of its practice on patient, family or community care" (Notler and Hott).
"Nursing research focuses primarily on the development of knowledge about nursing and its practice, including the care of the healthy and sick. It is directed toward understanding the fundamental mechanisms that affect the ability of individuals and families to maintain or increase optimal activity and to minimize the negative effects of illness" (C.I.E.).
This is a basic and fundamental aspect that all nursing researchers and research groups should consider as a starting point when designing their studies: the formulation of the research problem should be a nursing one.
It seems obvious, but in practice it is more frequent than desired to find research work developed by nursing professionals who generate knowledge from other disciplines.
Nursing clinical assessment is one of the many results that nursing research is capable of generating.
The CENES research group has been working for more than 10 years on the development of nursing knowledge within the framework of care, having focused its work in recent years on generating answers to some of the main questions raised in the field of nursing assessment.
In 2006, she developed the first classification of standardized variables of care, and now she has defined the concept of clinical nursing assessment in response to the need to focus her work on her own field of action: care.
This need has been detected and expressed in numerous scientific forums of the profession, and was already expressed by NANDA-I in its publication, stating:
"Nurses need to assess patients from the point of view of the nursing discipline in order to accurately diagnose and provide effective care" (NANDA-I. 2015-2017.
The results of the development of this concept of "nursing clinical assessment" were already presented at the last ICN international congress in Barcelona, defining it as "the specific assessment performed by the nursing professional, expressly focused on care and its application through the professional nursing model (nursing methodology)".
The nursing clinical assessment is part of the logical reasoning process defined for the application of professional care through nursing methodology, and its objective is to know the effectiveness of the care of the person, family or community at a given time.
The development of this concept, together with the provision of a taxonomy of standardized nursing variables, places nursing in a position to have standardized assessment protocols that inform of the degree of diagnostic reliability of the clinical judgment issued (nursing diagnosis), which is a major achievement in patient safety that only nursing is currently in a position to develop.
We hope that this project can have the necessary continuity and support to make this great advance a reality.
Antonio Arribas Cachá