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Puerto Real, España
Fundamentos: Los mayores institucionalizados han sido el grupo más afectado por la pandemia de COVID-19. El objetivo del presente estudio fue describir las principales características epidemiológicas de un brote de COVID-19, detectado en marzo 2020 en una residencia para mayores de Granada, e identificar los factores de riesgo asociados a la propagación del virus en el centro.
Métodos: Estudio observacional de cohorte retrospectivo.
Se describieron los principales aspectos clínicos y epidemiológicos registrados durante el período de seguimiento del brote (13/03/2020-20/06/2020). Mediante regresión de Cox multivariante se estimó la asociación entre las condiciones de salud de los residentes (enfermedades de base, nivel de dependencia física y deterioro cognitivo) y el riesgo de contraer la infección.
Resultados: Se encontraron 52 casos, confirmados mediante PCR, entre los residentes y 50 casos entre los trabajadores del centro. La curva epidémica fue compatible con un tipo de transmisión persona-persona. Se detectó una mayor incidencia de infección entre los residentes más dependientes, de acuerdo con la puntuación del Índice de Barthel, ajustando por edad, sexo y condiciones de salud. Los residentes con nivel de dependencia moderada (RR 2.82), grave (RR 4.71) y total (RR 3.49) tuvieron de 2 a 4 veces más riesgo de contraer la infección que aquellos con dependencia leve, a los 55 días de exposición (p<0,05).
Conclusiones: La curva epidémica orienta hacia la hipótesis de un fenómeno de transmisión cruzada trabajadores- residentes al origen del brote. En un contexto de elevada circulación del virus, el nivel de dependencia funcional de las personas institucionalizadas multiplica el riesgo de exposición al virus, facilitando su transmisión.
Background: Older people have been severely affected by the COVID-19 pandemic. The aim of this study was to describe the main epidemiological findings of a COVID-19 outbreak occurred in March 2020 at a nursing home for elderly in Granada. Risk factors associated with the spread of the virus in the center were investigated.
Methods: A retrospective cohort study was conducted, collecting the most relevant clinical and epidemiological findings, occurred during the outbreak follow-up period (from 03/13/2020 to 06/20/2020). The association between the residents’ health conditions (underlying diseases, level of physical dependence, level of cognitive impairment) and the risk of infection was estimated using multivariate Cox regression.
Results: 52 PCR-confirmed COVID-19 cases were identified among the residents and 50 cases among the employees of the nursing home. The epidemic curve was characteristic of a person to person transmission. Among residents with a higher level of physical dependence, according to the Barthel index score, a higher incidence of infection was detected, adjusting for age, sex and health conditions. At 55 days of exposure, moderately (RR 2.82), severely (RR 4.71) and completely (RR 3.49) dependent residents had between 2-4 times greater risk of infection than the minimally dependent residents (p<0.05).
Conclusions: The epidemic curve supports the hypothesis of a cross-transmission of infections between residents and staff members of the nursing home. In the context of sustained transmission of the virus, physical dependence of the residents increases the risk of exposure to the virus, facilitating its spreading.
