Las enfermedades crónicas (EC) son dolencias de larga duración, en general de progresión lenta y causa de alta morbimortalidad1. Según el informe de la OMS, «Global status report on non comunicable diseases 2010», el 63 % de las muertes en todo el mundo se debieron a EC, principalmente respiratorias, cardiovasculares, cáncer y diabetes mellitus (DM)2.
La investigación en cuidados de las Enfermedades Crónicas (EC) se ha realizado de forma progresiva, y con mucho esfuerzo del colectivo de enfermeras, haciéndose cada vez más presente desde el ámbito social y comunitario.
Un marcado envejecimiento de la población, de la mano de las EC, como la diabetes, hace que las necesidades sanitarias sean diferentes.
La diabetes, enfermedad pandémica silenciosa y posiblemente infravalorada a nivel social, es una de las más relevantes por su marcado incremento debido a los estilos de vida de la población, los factores de riesgo asociados, el tipo de autogestión de la enfermedad por parte del paciente y el soporte profesional recibido.