Saliha Belmonte Darraz, Ana María González Roldán, Joaquín de María Arrebola, Casandra Isabel Montoro Aguilar
Antecedentes y objetivo Los beneficios del ejercicio físico en el envejecimiento, y específicamente en la fragilidad, se han asociado tradicionalmente con una disminución del riesgo de mortalidad, del deterioro cognitivo y funcional, además de una menor probabilidad de padecer enfermedades crónicas. El tipo de ejercicio físico más beneficioso en adultos mayores es el denominado entrenamiento multicomponente, el cual combina entrenamiento de fuerza, resistencia, equilibrio y marcha.
Métodos El presente estudio consistió en el desarrollo y puesta en marcha del programa de ejercicio físico multicomponente «Actívate». Este fue dirigido a 49 personas mayores de 60 años y se basó en la metodología Vivifrail y el lema «por un envejecimiento activo».
Resultados El programa «Actívate» evidenció beneficios fisiológicos y funcionales en adultos mayores. En concreto, se observó un descenso en los niveles de la tensión arterial diastólica y en las alteraciones del sueño como la hipersomnia (t ≥ 2,72, p < 0,01), así como un aumento en la velocidad de la marcha (t= 7,84, p ≤ 0,001) y en el umbral de dolor ante la estimulación mediante presión (t ≥ -5,06, p ≤ 0,001). También, se reportaron mejoras en aspectos de calidad de vida (escala GENCAT), como el bienestar emocional, el desarrollo personal, el bienestar físico, la autodeterminación y la inclusión social (t ≥ -2,06, p < 0,05).
Conclusiones Estos datos confirman que el ejercicio físico, utilizando una dinámica multicomponente, no solo genera beneficios en la funcionalidad de las personas mayores, como se ha señalado previamente, sino que también, produciría una modulación del bienestar físico y emocional, así como del factor social, del patrón de sueño y de la percepción del dolor.
Background and aim The benefits of the physical exercise in aging, and specially in frailty, have been associated with reduced risk of mortality, chronic disease, and cognitive and functional impairments. Multi-component training, which combines strength, endurance, balance, and gait training, represents the most beneficial kind of physical exercise in older adults.
Methods Given the effectiveness of the multi-component training, a physical exercise program «Actívate» (based on the methodology Vivifrail), with the focus on «active aging», was conducted in the present study. Forty-nine older adults over 60 years participated in this program.
Results The physical exercise intervention led to a reduction in diastolic blood pressure, pain threshold and sleep disturbances (e. g. hypersomnia) (t ≥ 2.72, p < 0.01), as well as an increase of walking speed (t = 7.84, p ≤ 0.001). Further, quality of life factors (GENCAT scale), like emotional well-being, personal development, physical well-being, self-determination, and social inclusion, were greater after intervention (t ≥ −2.06, p < 0.05).
Conclusions These findings underline the benefits of multi-component training in functionality of older adults, and further, provide relevant aspects about the modulation of pain perception, sleep disturbances, social factors and physical and emotional well-being. Physical exercise programs such as «Actívate» should be promoted, in order to encourage healthy lifestyle habits, in the older adults’ population.