Cádiz, España
La Universidad nunca puede perder una de sus misiones más importantes: ofrecer a los alumnos una formación integral que incluya una preparación técnica, científica y profesional, pero siempre en equilibrio con una preparación humanística. Además de por el dominio de las técnicas y los métodos, los universitarios deben distinguirse por su capacidad de fundamentar esos conocimientos con una dimensión cultural que les permita integrar los valores y aportaciones de los que nos precedieron en el cultivo de la ciencia, del pensamiento o del cuidado de los enfermos. Creo que esto que digo es algo obvio, pero que conviene recordar sobre todo en estos tiempos en que las Humanidades en su conjunto viven el acoso de unas sociedades pragmáticas que sólo miran con admiración a lo que representa la tecnología; muy importante la tecnología, sí, pero sin olvidarse de que los humanistas que mantienen y defienden conocimientos como el latín, el griego, la literatura o la historia son imprescindibles para mantener el equilibrio de esa manoseada palabra que se llama Cultura [Fragmento de texto]