Manuel Amezcua Martínez
En los años 80 del pasado siglo, tiene lugar un giro en la escasa historiografía sobre la Enfermería en España, a la vez que explosiona el interés por esta parcela de conocimiento ante la necesidad de afianzamiento identitario, asociado a los cambios académicos que acaecieron con la inclusión de los estudios de Enfermería en la Universidad. Importantes fueron las aportaciones que por aquellos años realizaron los cultivadores de la "nueva historia" de la Enfermería (Eseverri, 1984; Ventosa, 1984; Domínguez Alcón, 1986; entre otros), que comenzaron a despertar el interés por acercarse a las fuentes primarias de la historia, mayoritariamente inexploradas hasta entonces por los escasos historiadores de la profesión. En cierta forma la situación ha mejorado, pero llama la atención las escasas menciones que aún se realizan a los textos primarios de la historia de la Enfermería, a pesar de la creciente accesibilidad de las grandes fuentes documentales, como la Biblioteca Nacional, o los archivos Histórico Nacional o el de Simancas, cuyos catálogos y una buena parte de los fondos son accesibles libremente a través de la red (PARES, 2013) [Fragmento de texto]