Manuel Amezcua Martínez, Rosa María Alberdi Castell (hom.)
A media mañana, los claustros del Campus de la Merced de la Universidad de Murcia comienzan a ser transitados por un nutrido número de doctores revestidos de sus trajes académicos (toga, muceta, birrete, medalla, guantes blancos). Es 2 de diciembre de 2016, un día esplendoroso, como preparado para la ocasión, pues en breves minutos va a comenzar en el paraninfo de la Universidad un solemne acto académico: el nombramiento de una mujer como Doctora Honoris Causa [Fragmento de texto].