La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es el paso del contenido del estómago hacia el esófago, siendo más común en niños con enfermedades del sistema nervioso central o en lactantes, sufriendo más de la mitad de ellos en su primer trimestre de vida. En los niños hasta 11 años podemos encontrar esófago de Barret que puede llegar a derivar en cáncer. Entre las principales manifestaciones halladas en la búsqueda bibliográfica del reflujo gastroesofágico (RGE) encontramos vómitos, tos o quemazón en el estómago, esofagitis que puede llevar a úlceras, o signos respiratorios, en los que pueden aparecer una de las mayores complicaciones como es la aspiración. Entre las medidas para evitar la aspiración por esta enfermedad afectan la alimentación del niño y de la madre, la eliminación de gases, la colocación del niño tras la toma, la utilización de espesantes o la lactancia materna.