Fundamento y objetivo: El estudio de la mortalidad poblacional del infarto agudo de miocardio (IAM), que incluye las muertes ocurridas antes de llegar al hospital, ofrece una visión más completa sobre la magnitud del problema que la obtenida estudiando únicamente la mortalidad de los casos que reciben atención hospitalaria. Pacientes y método: Los datos provienen del estudio IBERICA (Investigación, Búsqueda Específica y Registro de Isquemia Coronaria Aguda). Se describe la mortalidad en los primeros 28 días desde el inicio de los síntomas de los episodios de IAM registrados, durante 1997 y 1998, en la población de 25 a 74 años residente en 7 comunidades autónomas españolas: Castilla-La Mancha (Toledo y Albacete), Cataluña (Girona), Comunidad Valenciana (Valencia), Islas Baleares (Mallorca), Murcia, Navarra y País Vasco. Además, se estudia la relación entre mortalidad y otras variables como el sexo, la edad y el área geográfica. Resultados: Se registraron 10.654 casos de IAM de los que 4.105 fallecieron durante los 28 primeros días (38,5%; intervalo de confianza [IC] del 95%, 37,6-39,4%). La mortalidad fue del 37,0% (IC del 95%, 35,9-38,0%) en los varones y del 44,3% (IC del 95%, 42,3-46,4%) en las mujeres. La muerte se produjo fuera del hospital en 2.869 (69,9%) casos. La mayor mortalidad en mujeres estuvo relacionada fundamentalmente con una mayor mortalidad hospitalaria (45% superior a la registrada en los varones), siendo menor la diferencia en la proporción de casos que fallecieron fuera del hospital. La sintomatología típica de presentación del episodio fue más frecuente en varones (el 82,7 frente al 77,6%) (p < 0,001). Entre los pacientes que llegaron vivos al hospital, el tiempo transcurrido entre el comienzo de los síntomas y el inicio del tratamiento fue, en promedio, 30 min menor en los varones (p < 0,001). Conclusiones: La mortalidad poblacional por IAM en estas 7 áreas españolas es muy elevada aunque inferior a la de otros países industrializados. Aproximadamente dos de cada tres muertes ocurren antes de llegar al hospital. Estos datos refuerzan el papel prioritario de la prevención primaria y secundaria, ya que los cuidados hospitalarios tienen un impacto limitado en el control de la mortalidad poblacional por IAM. También indican que una forma de reducir la mortalidad debería incluir el acceso rápido a la desfibrilación y a las maniobras de resucitación de los pacientes que presenten una muerte súbita.