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Aranzazu Aparicio Vizuete, Ana María Lorenzo Mora, Laura Mª Bermejo López, Elena M. Rodríguez Rodríguez, Rosa María Ortega Anta, Ana María López Sobaler
Tradicionalmente se ha estudiado el efecto de los nutrientes en la salud. Desde este punto de vista, la leche y los derivados lácteos son alimentos que contribuyen a mantener y mejorar el estado nutricional. Por su elevado contenido en algunos nutrientes como la grasa saturada, entre otros, el consumo de lácteos se ha relacionado con la aparición de diversas enfermedades como la obesidad o la enfermedad cardiovascular. Sin embargo, los alimentos no se pueden clasificar como buenos o malos por su contenido en nutrientes, sino que también hay que tener en cuenta que en la matriz alimentaria se producen interacciones entre los nutrientes y otros compuestos bioactivos que pueden hacer que el consumo de dichos alimentos tenga resultados distintos a los esperados. En el caso de los lácteos, la evidencia científica señala que la matriz láctea podría jugar un papel importante frente a la prevención de diversas enfermedades crónicas no transmisibles.
The effect of nutrients on health has been studied traditionally. From this point of view, milk and dairy products contribute to maintaining and improving nutritional status. Due to its high content of some nutrients such as saturated fat, among others, dairy consumption has been linked to the appearance of several diseases such as obesity or cardiovascular disease. However, food cannot be classified as good or bad based on its nutrient content. On the contrary, those interactions between nutrients and other bioactive compounds that occur in the food matrix must also be taken into account, as they can lead to different results than those expected derived from their consumption. In the case of dairy products, the scientific evidence indicates that dairy matrix could play an important role in the prevention of several non-communicable diseases.
